Canto
Salmo
Oh Dios, tú eres mi Dios, por ti madrugo,
mi alma está sedienta de ti;
mi carne tiene ansia de ti,
como tierra reseca, agostada, sin agua.
¡Cómo te contemplaba en el santuario
viendo tu fuerza y tu gloria !
Toda mi vida te bendeciré
y alzaré mis manos invocándote.
Me saciaré como de enjundia y de manteca,
y mis labios te alabarán jubilosos.
En el lecho me acuerdo de ti
y velando medito en ti,
porque fuiste mi auxilio,
y a la sombra de tus alas canto con júbilo ;
mi alma está unida a ti,
y tu diestra me sostiene.
Lectura
Los primeros cristianos acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la comunión, a la fracción del pan y a las oraciones. El temor se apoderaba de todos, pues los apóstoles realizaban muchos prodigios y señales. Todos los creyentes vivían unidos y tenían todo en común; vendían sus posesiones y sus bienes y repartían el precio entre todos, según la necesidad de cada uno. Acudían al Templo todos los días con perseverancia y con un mismo espíritu, partían el pan por las casas y tomaban el alimento con alegría y sencillez de corazón. Alababan a Dios y gozaban de la simpatía de todo el pueblo. El Señor agregaba cada día a la comunidad a los que se habían de salvar.
o
Al desembarcar, Jesús vio mucha gente, sintió compasión de ellos, pues estaban como ovejas que no tienen pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas. Era ya una hora muy avanzada cuando se le acercaron sus discípulos y le dijeron: «El lugar está deshabitado y ya es hora avanzada. Despídelos para que vayan a las aldeas y pueblos del contorno a comprarse de comer.» El les contestó: «Dadles vosotros de comer.» Ellos le dicen: «¿Vamos nosotros a comprar doscientos denarios de pan para darles de comer?» El les dice: «¿Cuántos panes tenéis? Id a ver.» Después de haberse cerciorado, le dicen: «Cinco, y dos peces.» Entonces les mandó que se acomodaran todos por grupos sobre la verde hierba. Y se acomodaron por grupos de cien y de cincuenta. Y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los iba dando a los discípulos para que se los fueran sirviendo. También repartió entre todos los dos peces. Comieron todos y se saciaron. Y recogieron las sobras, doce canastos llenos y también lo de los peces. Los que comieron los panes fueron cinco mil personas.
Canto
Silencio
Oración de Intercesión
Te pedimos por quienes comienzan a conocer a Cristo: que el Señor les fortalezca en su camino.
Por los niños, por quienes les acogen y les despiertan a la fe, te pedimos Señor.
Te pedimos por los enfermos y quienes terminan su vida en soledad: que el Señor les dé la fuerza que necesitan.
Te pedimos por los que están condenados a la reclusión o al exilio: que el Señor sostenga su esperanza.
Para que el fuego de tu Espíritu renueve nuestro entusiasmo y nos haga acogedores con los que no te conocen, te pedimos Señor.
Que tu Iglesia se renueve en la mesa de tu Palabra y de tu Eucaristía, te pedimos Señor.
Padrenuestro
Oración
Dios, nuestro Padre, tú buscas infatigablemente al que se aleja de ti. Y, por medio del perdón, vienes a poner en nuestro dedo el anillo del hijo pródigo, el anillo de la fiesta.
Bendícenos, Cristo Jesús, tu amor es más grande que nuestro corazón.